Caricias para enamorar a un hombre
Cuando la gente conversa sobre los encuentros en la cama, lo más común es que nuestra mente (y el tema) se acabe dirigiendo hacia lencerías, posiciones buenas y malas y hasta los juguetes eróticos que pueden o no utilizar. Y, si bien esto es una parte muy importante de la intimidad en pareja, muchas personas cometen el error de ignorar cosas que bien pueden ser hasta más importantes y más sencillas de aprovechar para hacer que un hombre “enloquezca”.
Las caricias son un arma poderosa y modesta que pueden hacer que cualquier relación íntima sea muchísimo más placentera. El dominio de las caricias, de hecho, podría ser considerado un arte ya que requiere que prestes mucha atención a cómo tus manos se mueven sobre cada parte de tu pareja y cómo las variaciones en intensidad y ritmo son decisivos en que tu pareja alcance el nivel máximo de placer.
Para alimentar tu relación y volverte una experta en las caricias, acá tienes las áreas que deberás “atacar”:
1. Cabello
El efecto de las caricias en el cabello es algo que muchos desconocen pero que pueden relajar de sobremanera a tu pareja.
El acto de acariciar el cuero cabelludo suele ser algo muy estimulante para cualquier hombre gracias a que despierta la imaginación, sugiriendo formas en las que bien pudieses acariciar, también, otras partes de su cuerpo.
Gracias a ello, las caricias en el cabello son excelentes tanto para el “juego previo” o para pasar un rato agradable y relajante (recuerda, no toda intimidad es sexo).
2. Toda el Área de la Entrepierna
No hay que convencer a nadie de que esta área del cuerpo es una de las preferidas por los chicos para recibir caricias puesto que es la parte íntima donde son más sensibles.
Acá podrás dejar volar tu imaginación y aprovecharte de que el más pequeño roce puede estimularlos. Una idea para comenzar es acariciando sus testículos para luego pasar al miembro, desde la base hasta su punta.
La clave acá es hacerlo suavemente y guardando mucho cuidado, la sensibilidad excesiva puede hacer muy fácil que cualquier caricia se torne dolorosa.
3. Pectorales
Se podría decir que esta área ocupa el segundo lugar en cuanto a las caricias que los hombres prefieren, cosa que se debe bastante a la extrema sensibilidad de los pezones.
Lo que debes tomar en cuenta al acercarte a esta sección es mantener movimientos circulares que vayan desde adentro hasta afuera y cambiar a la dirección contraria, alternando las caricias.
Si quieres alimentar la pasión, además, estarás en una posición perfecta para susurrarle al oído.
4. Espalda
Unas caricias en la espalda son la manera perfecta para que tu pareja olvide cualquier preocupación y estrés que pudiese tener antes de llegar y verte.
Mientras lo consientes, puedes también pasar tus uñas ligeramente a lo largo de esta parte y encender su deseo inmediatamente. Por supuesto, cuida tus impulsos con estos juegos de rasguños para que no termines causándole más dolor del que pueda gustarle.
Por último, repetimos que la intimidad es más que sexo, a veces lo único que necesita un hombre es relajarse un momento
5. Cuello
Contendiente con los pectorales por el puesto de la segunda zona erógena por excelencia, el cuello puede ser la forma más rápida y sutil para lograr que tu pareja se sienta listo para encontrarte en la intimidad.
Procura no estancarte en la sección frontal del cuello. Ten siempre en mente que el área de la nuca también es sumamente sensible y cualquier hombre amará que lo acaricies en esa parte.
Te invitamos a que sigas leyendo nuestro artículo: ¡Conquístalo ya! y haz que te ame para siempre