Impotencia sexual: Causas y prevención de la disfunción eréctil
La disfunción eréctil o también conocida como impotencia sexual, es la incapacidad que tiene el hombre de iniciar y mantener la erección durante el tiempo determinado de las relaciones sexuales.
Se considera que este problema afecta entre 15 y 30 millones de hombres. La impotencia masculina se observa comúnmente en las personas mayores de 65 años, aunque esta no sea una característica determinante, ya que también puede afectar a hombres de menor edad luego de la pubertad.
Dentro de los problemas sexuales masculinos se pueden presentar 4 grupos como la disfunción eréctil, eyaculación precoz, falta de libido sexual y dificultades para eyacular. Actualmente la salud sexual es sumamente importante en la calidad de las personas.
La impotencia sexual, a pesar de no ser un problema de salud que acarree riesgos de vida, puede traer consecuencias indeseables en la vida personal del paciente, influyendo en sus relaciones y en su autoestima, pudiendo, incluso, llevar al paciente a la depresión.
Es sumamente importante poner énfasis en que esta dificultad eventual en la erección del miembro masculino, no se considera como impotencia. Para que pueda ser definida de esa forma, el hombre debe ser incapaz de mantener erecciones por lo menos en un 75% de sus experiencias. El no poder tener una erección completamente satisfactoria una que otra vez se considera dentro de lo normal y pasa en todos los hombres, inclusive en jóvenes y adolescentes.
Es muy importante mantener una diferenciación entre la impotencia sexual y la falta de libido. En la disfunción eréctil, el hombre siente deseo sexual por su pareja como normalmente tendría, sin embargo, es incapaz de mantener o iniciar una erección satisfactoria. En la falta de libido, la erección no se da debido a la ausencia de interés sexual.
Este problema puede prevalecer conforme pasen los años, asimismo en conjunto con otras enfermedades, como la diabetes, hipertensión, enfermedades al corazón, obesidad, etcétera. Es por ese motivo que se estima que entre el 30% y 40% de hombres pasado los 40 años presenta esta dificultad.
Síntomas de la disfunción eréctil
Los síntomas más comunes de este problema son:
- Inconvenientes para tener una erección
- Dificultad para mantener una erección
- Disminución del deseo sexual
¿Cuándo se debe acudir a un especialista?
Usted debe acudir a un experto o médico cuando presente problemas sexuales de erección o de otro tipo son un problema para usted o su pareja, si tiene diabetes, enfermedades del corazón u otro problema de salud conocido que puede estar vinculado a la disfunción eréctil, o si presenta otros síntomas junto con la disfunción eréctil que puede no parecer relacionados.
Causas de la impotencia sexual
Aunque es considerado como un trastorno de la vejez también puede afectar a los hombres a cualquier edad después de la pubertad. La impotencia masculina se cree que ocurre ya sea debido a causas físicas o psicológicas.
La excitación sexual masculina es un proceso complejo que involucra el cerebro, las hormonas, las emociones, los nervios, músculos y vasos sanguíneos. La disfunción eréctil puede ser consecuencia de un problema con ninguno de ellos.
Del mismo modo, el estrés y los problemas de salud mental pueden causar o empeorar la disfunción eréctil. A veces una combinación de problemas físicos y psicológicos causa este problema. Por ejemplo, un problema físico menor que retarda su respuesta sexual puede causar ansiedad sobre el mantenimiento de una erección. La ansiedad resultante puede provocar o empeorar la disfunción eréctil.
Enfermedades graves y crónicas
Entre las enfermedades crónicas asociadas a la disfunción eréctil se encuentran: hipertensión arterial, diabetes, enfermedades cardiovasculares, aumento del colesterol, insuficiencia hepática y renal, depresión y trastornos psicóticos.
Traumatismos o cirugías
Las intervenciones quirúrgicas pélvicas se encuentran muy asociadas con la aparición de la disfunción eréctil. Entre las más comunes son el cáncer de próstata, vejiga o recto. En estos casos no sólo se pueden ver dañados los nervios, sino también los vasos de la zona.
Entre los traumatismos asociados a la disfunción eréctil, se incluyen los que lesionan la columna vertebral, traumatismos craneales y fractura de pelvis. La disfunción se produce porque se interrumpe la conexión entre el sistema nervioso y el tejido eréctil.
Medicinas u otros problemas
Algunas medicinas pueden causar como un efecto adverso la disfunción eréctil. Entre ellos se encuentran los medicamentos que se utilizan para tratar la hipertensión arterial, el exceso de colesterol en la sangre, la depresión, el insomnio, la úlcera de estómago, fármacos para el tratamiento de radioterapia o cáncer.
Muchas veces es imposible retirar el medicamento ni sustituirlo o bien no es suficiente su retirada para que la función eréctil se restablezca. En estos casos la utilización de un tratamiento sintomático para la disfunción eréctil es algo apropiado. No debe retirar la toma de un fármaco prescrito por su médico sin consultárselo, aunque usted sospeche que es el causante de su disfunción eréctil.
Componentes sicológicos
Se cree que la disfunción eréctil tiene un origen sicológico. Existen situaciones que pueden facilitar la aparición de disfunción eréctil a medio o largo plazo: una educación moral o religiosa restrictiva, una información sexual inadecuada, experiencias sexuales traumáticas o relaciones deterioradas entre los padres.
La Diabetes
La diabetes es la enfermedad crónica que con más frecuencia da lugar a una disfunción eréctil. En los varones que padecen diabetes, la disfunción eréctil es una complicación más de la enfermedad, al igual que la hipertensión, cifras altas de colesterol, etc. Hasta un 35 a 75% de los diabéticos pueden llegar a padecer este problema en algún momento de la enfermedad.
Un buen control de la diabetes disminuye la probabilidad de aparición de la disfunción eréctil. Recuerde que es importante: mantener cifras de glucosa controladas, cumplir estrictamente con el tratamiento, seguir los consejos sobre ejercicio físico y hábitos dietéticos recomendados por su médico.
Hipertensión
La hipertensión arterial es un problema frecuente que afecta aproximadamente al 20 a 40% de la población. Hasta un 25 a 30% de los varones que padecen hipertensión, manifiestan trastornos en la respuesta sexual, siendo el problema más frecuente la disfunción eréctil. Un buen control de la tensión arterial disminuye la probabilidad de aparición de disfunción eréctil.
Problemas cardiacos
Entre un 38 a 78% de los varones afectados por infarto de miocardio presenta problemas de erección. Si se le diagnostica una cardiopatía, no dude en preguntar a su médico todas sus dudas y preocupaciones sobre su futura vida sexual.
Las principales causas físicas de disfunción eréctil en los pacientes con problemas de corazón, son la aterosclerosis, porque produce dificultad en la llegada de sangre al pene, y algunos fármacos. En numerosas ocasiones el miedo a sufrir una recaída durante el acto sexual conduce a una disfunción eréctil e incluso a querer evitar la relación sexual.
Depresión
Este trastorno puede anular la capacidad de la persona para disfrutar de los placeres de la vida. No sólo afecta a su mente, también a su cuerpo, en ocasiones de forma inesperada. Como consecuencia, muchos hombres a los que se les ha diagnosticado depresión, sufren además otro problema: disfunción eréctil.
Complicaciones
Las complicaciones por disfunción eréctil puedes ser: Una vida sexual insatisfactoria, estrés o ansiedad, vergüenza o baja autoestima, problemas o relaciones maritales, la incapacidad para embarazar a su pareja.
¿Cómo diagnosticar este problema?
Para la mayoría de hombres con este padecimiento, un examen físico y contestar preguntas es todo lo que se necesita para que un médico esté dispuesto a recomendar un tratamiento. Si su médico sospecha que los problemas subyacentes pueden estar involucrados, o si tiene problemas de salud crónicos, es posible que necesite más pruebas o tal vez necesite ver a un experto en el tema.
Tratamiento de la disfunción eréctil
Lo primero que su médico hará es preguntarle cosas puntuales para asegurarse de que está recibiendo el tratamiento adecuado para cualquier problema de salud que podría estar causando o empeorando la disfunción eréctil.
Existe una variedad de opciones para el tratamiento de la disfunción eréctil. La causa y la gravedad de su condición, y los problemas de salud subyacentes, son factores importantes para que su médico esté recomendando el mejor tratamiento o de los tratamientos para usted. Su médico puede explicarle los riesgos y beneficios de cada tratamiento y tendrá en cuenta sus preferencias. Las preferencias de su pareja también pueden desempeñar un papel en las opciones de tratamiento.
Entre los medicamentos para el tratamiento tenemos: Sildenafil (Viagra), Tadalafil (Cialis) y Vardenafil (Levitra, Staxyn). Estos tres medicamentos funcionan de la misma forma, los cuales, mejorar muchísimo los efectos de óxido nítrico, una sustancia química natural del cuerpo que relaja los músculos del miembro masculino.
Estos medicamentos no pueden solucionar su disfunción eréctil inmediatamente. Puede que tenga que trabajar con su médico para encontrar el medicamento adecuado y la dosis que usted requiera.